KATHARINE HEPBURN
Nació el 12 de mayo de 1907 en Hartford.
Su padre, un médico de Nueva Inglaterra, y su madre, una sufragista, siempre alentaron su independencia.
En 1928 contrajo matrimonio con Ludlow Ogden, del que se separó a los pocos días de la boda y obtuvo el divorcio en 1934. En 1936 estableció relaciones sentimentales con el multimillonario Howard Hughes. El amor de su vida fue Spencer Tracy, con el que trabajó por primera vez en 'La mujer del año'. Desde entonces fueron una pareja inseparable, tanto desde el punto de vista profesional como personal. Tracy se convirtió en el amor de su vida, del que sólo la separó la muerte de éste en 1967.
No cuenta siempre con el apoyo del público, pero con el paso del tiempo consigue metérselo en el bolsillo. Consigue su primer Oscar por su actuación en Gloria de un día (1933).
En 1937 actúa en Damas del teatro de Gregory La Cava, donde perfeccionaba todavía más su interpretación de actriz ambiciosa, apoyada por un diálogo centelleante y por una realización de una vivacidad poco común. Un año después interpreta dos obras maestras de la comedia: la agridulce Vivir para gozar, de George Cukor, y la alocada La fiera de mi niña, de Howard Hawks. Pero debido al poco dinero que hacía ganar a los estudios, tuvo que obligada pasarse al teatro. Estuvo entre las finalistas para interpretar el papel de Escarlata O'Hara en Lo que el viento se llevó, que perdió frente a la recién llegada Vivien Leigh.
Fue la intérprete que consiguió más Óscar de la historia. Cinco: en 1933 con “Gloria de un día”; en 1962, con “Larga jornada hacía la noche”; en 1967 con “Guess Who'S”; en 1968 con “El león en invierno” ; y por último en 1981 con la película “On Golden Pond”; y estuvo nominada hasta en 12 ocasiones.
LAUREN BACALL
Neoyorquina, modelo y actriz, Bacall debutó en Hollywood a los 19 años junto al que sería su esposo en la mencionada cinta de Hawks. Nacida Betty Joan Perske, “una joven judía del Bronx” como se la conoció en la industria coloquialmente mientras desarrollaba sus primeros papeles, enseguida se ganó el corazón de todos gracias a esa frase dicha en la película que la inmortalizaría, diciendo eso de “¿Sabes silbar, verdad? Solo pones los labios juntos y soplas”, con esa voz aguardentosa que la caracterizaba, tras mirar a Humprey Bogart para pedirle fuego.
Otros de sus trabajos más conocidos fueron Cayo
Largo, El sueño eterno (también de
Hawks), Callejón sangriento, Escrito sobre el
viento, o, más recientemente El amor tiene dos caras,
dirigida por la también actriz Barbra Streisand y por la que obtuvo
su única candidatura al Oscar.
En la segunda de ellas, quizá la mejor adaptación a la pantalla jamás realizada de una novela de
Raymond Chandler, también era Bogart, como el detective Philip
Marlowe, su compañero de reparto. La Academia de Artes y Ciencias
Cinematográficas de Hollywood le concedió un Oscar de honor en
2009 como una de las más legendarias y recordadas intérpretes
del Hollywood de oro.
Bacall estuvo casada con Bogart hasta la muerte del intérprete en
1957. Juntos dejaron, además de sus filmes, una de las más
conocidas imágenes de protesta de actores contra la caza de brujas
del Comité de Actividades Antinorteamericanas del senador Joseph
McCarthy.
BETTE
DAVIS
Bette Davis, la protagonista de películas legendarias de la
historia del cine como Eva al desnudo, Jezabel, La loba o ¿Qué fue
de Baby Jane?, murió en París, a los 81 años, víctima de un
cáncer de mama. La actriz, una de las grandes figuras de la época
dorada de Hollywood, debutó en el cine en 1931 e intervino a lo
largo de su carrera en 80 filmes. Sus caracterizaciones de mujer fría
y dura y la profesionalidad de sus interpretaciones le valieron el
reconocimiento de todos los públicos y el ser galardonada en dos
ocasiones con el oscar. Bette Davis recibió un homenaje en la edición del Festival de San Sebastián del año 1989.
Durante sus 60 años de reinado en el mundo del séptimo arte,
Bette Davis recibió una docena de premios, entre ellos dos Oscars,
el primero en 1935 por Dangerous (La intrusa), en
la que interpretaba a una vieja actriz alcohólica, un papel similar
al que encarnó 15 años más tarde en Eva al desnudo, de
Josep L. Mankiewicz. La segunda estatuilla le fue otorgada en 1938
por su interpreación en Jezabel.
Sus caracterizaciones de mujer fría y dura, lo contrario de
un sex-symbol, trascendieron la pantalla para alcanzar a
su tumultuosa vida privada, en la que se casó cuatro veces y tuvo
una hija de su primer matrimonio.
Era, como ella misma declaró recientemente, "una verdadera
yanqui, nacida en Nueva Inglaterra", que triunfó en los
estudios de la Warner, de Hollywood, después de haberse iniciado en
el teatro en 1928, a los 20 años.
Bette Davis murió en Paris a los 81 años el 8 de octubre de
1989. Con su muerte desapareció una gran dama del séptimo arte.
AUDREY HEPBUR
Nació en bruselas en 1929 y murió en Suiza en 1993
Audrey nació en el periodo de entreguerras. Su madre era una cantante de ópera y su padre, que abandonó el nido familiar cuando Hepburn tenía poco más de cinco años, se dedicaba a la banca. La infancia y la adolescencia de Audrey estuvieron marcadas por el estallido de la Segunda Guerra Mundial, un trauma que la acompañaría el resto de sus días.
Candidata cinco veces a los Oscar y ganadora de uno a la mejor actriz por su papel en Vacaciones en Roma, su carrera comenzó cuando se mudó a Londres para completar su formación académica y llevar a cabo algunos trabajos relacionados con la imagen para financiar sus estudios.
Casada en dos ocasiones, una con Mel Ferrer y otra con el aristócrata italiano Andrea Dotti y madre de dos hijos, Sean -fruto de su primer matrimonio y Luca al que dio a luz mientras estaba casada con Dotti, la leyenda de Audrey asegura que el éxito profesional siendo la protagonista de cintas tan míticas como Sabrina o Desayuno con diamantes no pudo aplacar la frustración emocional y la infelicidad de su vida personal. Al final de su vida encontró el consuelo en las labores benéficas, llegando a ser Embajadora de Buena Voluntad de UNICEF.
Su talento como actriz, un look, una sencillez y la cercanía nunca antes practicados en Hollywood quedó fuera de toda duda en películas de Billy Wilder o John Huston. Su estilo, asociado a un físico frágil, ha pasado a la historia de la moda gracias, en parte, a uno de sus grandes amigos y mentores, Hubert de Givenchy. La vistió por primera vez para su personaje de Sabrina y desde entonces han formado uno de los dúos más memorables del binomio cine-moda. La relevancia de Hepburn en cuestiones de estilo
A Hepburn solían emparejarla los primeros años con actores maduros, pues tras el rodaje con Bogart pasó a protagonizar Una cara con ángel, con Fred Astaire, y Ariane, con Gary Cooper. A nivel de actriz, su trabajo más esforzado es posiblemente Historia de una monja, basada en el caso real de una religiosa enviada al Congo a trabajar como enfermera. Justo después rodó un western con John Huston, film del que renegó incluso su director, quien en su autobiografía aseguraba que no lo podía soportar.